
Una vez al año se produce un momento especial y no me refiero a la rotación de la tierra alrededor del sol, sino al cumpleaños de cada uno.
Algunos cumplen sus años en días señalados y recordados por todos, día de navidad, día de reyes, el día de celebración del santo de la ciudad, de la región, el día que murió Franco, etc.
Y luego hay celebraciones de cumpleaños mas sonadas que otras, ya que no es lo mismo, aunque lo parezca, celebrar tu 18º cumpleaños, los dos patitos (22 añitos), los 60, los 100 o los 27 o los 31. Que parece que son insulsos y anodinos.
Yo, hoy, no me puedo quejar, el día de mi cumpleaños se celebra justo con el día mundial del Sida y además cumplo la edad de cristo, que mejor combinación de factores (Cristo, el SIDA y yo) para que luego digan que uno es modesto y no tiene la estima elevada…
Unos dirán que ya soy un viejo, otros que aun soy joven y algunos dirán que Peter Pan no existe.
Yo sólo se que los años no importan lo que importa en realidad es mirar hacia delante o hacia atrás, los que miran hacia delante siempre serán jóvenes y los que miran hacia atrás siempre serán viejos.
Pero desgraciadamente siempre habrá un día de cumpleaños en que te des cuenta que de verdad eres viejo, será el día en que te cedan el asiento en el autobús.
¡Hasta que ese día llegue, a disfrutar!